Sin respuestas reclamos del sector aluminio

jueves, 06 de mayo de 2010

Foto William Urdaneta

 ¿Quién aumentó a los militares? ¿Quién aumentó a los médicos? ¿Quién habló de salario mínimo? Las preguntas formuladas por el secretario general de Sintrabauxilum, Edgar Valentine, durante la asamblea de calle realizada por los sindicatos y trabajadores del sector aluminio, apuntan a la responsabilidad que tiene el Presidente de la República en la crisis de las empresas básicas.  Ante la indisponibilidad financiera de CVG para pagar las deudas laborales, los empleados de Bauxilum y Venalum retomaron las protestas de calle sin hallar interlocutores válidos.

 Debajo del puente adyacente a la operadora de bauxita en Matanzas la dirigencia sindical fijó posición sobre la reunión que sostuvieron con la vicepresidenta de la corporación, Haydee Valenzuela, quien palabras menos palabras más les dijo que no hay recursos para cancelar los pasivos.

 “No podemos seguir sacrificando a los trabajadores”, expuso Leonardo Calderón, miembro del comité ejecutivo de Sutralum.

 La dirigencia sindical informó que reactivará los pliegos conciliatorios que están en la Inspectoría del Trabajo, como paso previo a la radicalización del conflicto.

 David Torres, secretario de organización de Sutralúmina Bolívar, hizo hincapié en mantener la unidad en estos tiempos difíciles, sobre todo considerando que poco a poco las instancias se han declarado incompetentes.

 Manifestó no comprender cómo la CVG manda a solicitar los recursos con los presidentes de las empresas, que el propio Mibam propuso remover con la participación de los trabajadores. “Nosotros sabemos que ellos no tienen la respuesta, vamos a la CVG y tampoco. Es un juego que tienen ¿o es que están midiendo fuerzas?”, pregunta Torres.

 El dirigente de Sutralum, quien además es militante del PSUV, alertó a los trabajadores sobre la estrategia del Gobierno para debilitar a los sindicatos.

Una provocación
 Emilio Campos avisó que la vicepresidenta planteó que serán las comisiones las que valúen si de las inversiones podrá sacarse un porcentaje para pagar los pasivos. “Eso sí, será con las mesas del Plan Guayana, quiere decir que no estaremos los sindicatos. Van a ir a imponer un salario y condiciones sin discutirlo”.

 Aclara que la dirigencia sindical no está en contra del control obrero, pues se consideran parte de esa instancia.

 Campos descartó que haya una confrontación entre los empleados de control obrero y los sindicatos, pues cree que lo que hay realmente es una confrontación política promovida por el gobierno.

 “El control obrero no es malo, porque cuando tenemos uno de nuestros trabajadores como delegados en ciertas áreas, eso es control obrero y eso beneficia a los trabajadores”.

 Edgar Caldera, ex director laboral de CVG Alcasa, planteó que es necesario empujar la lucha hacia la productividad de las factorías que -a su juicio- se ha llevado a la quiebra de manera intencional.

 Por ejemplo, de 216 celdas sólo 120 están funcionando y 50 de ellas están a punto de colapsar en Alcasa. Además indicó que los recursos de inversión para el Plan Guayana Socialista son insuficientes pues al menos se requieren US$ 6 mil millones.

“Presidente Chávez, escúchenos”
 Edgar Valentine, secretario general de Sintrabauxilum, indicó que el principal responsable de los aumentos salariales para los trabajadores es el presidente Hugo Chávez.

 “¿Quién le aumento a los militares? ¿Quién les aumentó a los médicos? ¿Quién habló de salario mínimo?”, preguntó Valentine. “Nosotros le decimos a usted señor Presidente de la República, póngale la cascabel al gato y deje de andar buscando a Dios por los rincones. Deje de mandar ministros a pagar platos rotos porque usted es el único dueño, no nos podemos calar más a un funcionario que nos diga que las empresas están quebradas”.

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