El régimen comunista venezolano está dispuesto a crear una nueva república
al sur de Venezuela, en caso de que sea sacado del poder por una invasión o
por un golpe de estado
“Al sur de Venezuela, acantonaron tropas y establecieron baterías anti aéreas con la excusa de la defensa de las Industrias Básicas, la electricidad y la represa; pero la realidad es otra: tienen pensado dividir a la nación si se ven obligados a salir del poder”, afirma Thor Halvorssen, analista político y de inteligencia.
El régimen comunista encabezado por Nicolás Maduro y respaldado por la dictadura cubana, tiene prevista la instauración de una República Indígena de origen Boliviano, Ecuatoriano y Brasileiro.
Dividir territorios nacionales es parte de la “cultura” comunista cuando se ven debilitados en las repúblicas donde operan; recuerden lo que sucedió con Alemania, Vietnam, Corea, entre otras naciones.
El Plan se conoce como Escudo Guayanés y forma parte del plan diabólico denunciado por el analista político y de inteligencia Thor Halvorssen, ex-embajador y ex-presidente de la CANTV; quien se apoya en documentos e información manejada por el prestigioso doctor en derecho, Carlos Ramírez López, quien vía twitter realizó la primera alerta.
Hace dos meses, el abogado Carlos Ramírez López informó a sus seguidores en Twitter acerca de este sombrío plan que el régimen venezolano tituló PLAN ESCUDO GUAYANES. Por la forma rápida que se maneja la red, muchas personas no conocieron el texto. Hoy, Thor Halvorssen explica con detalles el tema tratado por Ramírez, que se une a las denuncias acerca de los diferentes propósitos que tiene el régimen comunista venezolano para mantenerse en el poder.
“El Plan Escudo Guayanés utilizaría tanto a la población indígena como los espacios donde residen estos venezolanos y forma parte de un plan organizado por el expresidentes Hugo Chávez Frías meses antes de morir. Objetivo: mantenerse en el poder”. Explica el analista de inteligencia, quien asegura contar con fuentes altamente confiables y de seguridad.
Thor Halvorssen explica que, por exigencia del ex presidente Hugo Chávez, -muerto a finales del año pasado en circunstancias aún no claras en la isla de Cuba- la Sala Situacional elaboró un plan denominado Escudo Guayanés por el sitio geográfico donde se ejecutaría. El mismo se plantea dos posibles escenarios:
1.- En caso que se presentara un golpe de estado.
2.- La posibilidad de una invasión.
Según lo también publicado por Ramírez López, en el plan Escudo Guayanés participa el Alto Mando Militar y Político del régimen; junto a acuerdos secretos con los gobiernos de Ecuador, Bolivia y Cuba.
“El esfuerzo se dirige a establecer un territorio donde ellos se harían fuertes para resistir manteniendo posibilidades de entrar al territorio y salir de él; señala Thor Halvorssen quien explica que el régimen “tiene prevista la instauración de una República Indígena de origen Boliviano, Ecuatoriano y Brasileiro”.
Según la denuncia que realizan tanto Halvorssen como Ramírez, el plan se elaboró para ser ejecutado en el Estado Bolívar y tiene objetivos al corto, mediano y largo plazo.
“Contempla la penetración e ideologización en la población indígena para comprometerla con la causa socialista y establecer una República Indígena Socialista; construcción de vías, carreteras, puertos, pistas de aviación, bunkers y otras instalaciones para tener la posibilidad de movilización”, afirma Halvorssen y agrega que “acantonaron tropas y establecieron baterías anti aéreas con la excusa de la defensa de las Industrias Básicas, la electricidad y la represa”.
El plan ha considerado que el Estado Bolívar tiene salida al Atlántico por el Orinoco por si hay bloqueo por el Caribe.
Halvorssen asegura que en este plan se ha incorporado al Almirante Diego Molero Belavia y, por ello, se le nombró embajador en Brasil.
Según el Plan Escudo Guayanés en ese territorio se tendría ocultos aviones de guerra sin distintivos y, tal como se denunció a través de Hispanosreport, últimamente tenían previsto usar esos aviones para bombardear algunos blancos específicos y culpar de ello a la oposición venezolana, parte de ese plan fue la reiteración de una "denuncia" que hizo JV Rangel de que la oposición había adquirido 17 aviones de combate y que los tenía en una base norteamericana ubicada en Colombia.
El plan está vigente y tiene que ver con la expresión utilizada por Nicolás Maduro en una de sus últimas cadenas: “Tic, tac, tic, tac”. La idea del titulado “Plan Diabólico" concluiría con la declaratoria de un Estado de Excepción, suspensión de garantías, de elecciones y persecución contra opositores.
“El esfuerzo se dirige a establecer un territorio donde ellos se harían fuertes para resistir manteniendo posibilidades de entrar al territorio y salir de él; señala Thor Halvorssen quien explica que el régimen “tiene prevista la instauración de una República Indígena de origen Boliviano, Ecuatoriano y Brasileiro”.
Según la denuncia que realizan tanto Halvorssen como Ramírez, el plan se elaboró para ser ejecutado en el Estado Bolívar y tiene objetivos al corto, mediano y largo plazo.
“Contempla la penetración e ideologización en la población indígena para comprometerla con la causa socialista y establecer una República Indígena Socialista; construcción de vías, carreteras, puertos, pistas de aviación, bunkers y otras instalaciones para tener la posibilidad de movilización”, afirma Halvorssen y agrega que “acantonaron tropas y establecieron baterías anti aéreas con la excusa de la defensa de las Industrias Básicas, la electricidad y la represa”.
El plan ha considerado que el Estado Bolívar tiene salida al Atlántico por el Orinoco por si hay bloqueo por el Caribe.
Halvorssen asegura que en este plan se ha incorporado al Almirante Diego Molero Belavia y, por ello, se le nombró embajador en Brasil.
Según el Plan Escudo Guayanés en ese territorio se tendría ocultos aviones de guerra sin distintivos y, tal como se denunció a través de Hispanosreport, últimamente tenían previsto usar esos aviones para bombardear algunos blancos específicos y culpar de ello a la oposición venezolana, parte de ese plan fue la reiteración de una "denuncia" que hizo JV Rangel de que la oposición había adquirido 17 aviones de combate y que los tenía en una base norteamericana ubicada en Colombia.
El plan está vigente y tiene que ver con la expresión utilizada por Nicolás Maduro en una de sus últimas cadenas: “Tic, tac, tic, tac”. La idea del titulado “Plan Diabólico" concluiría con la declaratoria de un Estado de Excepción, suspensión de garantías, de elecciones y persecución contra opositores.
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