“Vamos a tener que salir a protestar”

Los trabajadores y la dirigencia sindical organizan una marcha para el 26 de julio en Ciudad Guayana.

Clavel A. Rangel Jiménez

Descartada la intervención del Ministerio de Industrias Básicas y Minería (Mibam) frente a los despidos en Ferrominera Orinoco (Mibam), las inversiones para las empresas y la discusión de los contratos colectivos, la conclusión del secretario general de Sutralúmina-Bolívar, José Luis Morocoima, es que el único camino que resta es la protesta.

Empero, también hay conciencia de que el problema del país y de Guayana es institucional. “Los trabajadores tienen que estar conscientes de que las próximas movilizaciones que se hagan en Guayana van a tener que ser bajo la firme convicción de que si no hacemos nada, si los trabajadores no salimos a decir lo que está ocurriendo, sencillamente no va a haber ninguna forma de solución”.

El planteamiento de Morocoima también incluye apartar las diferencias políticas con otros frentes, incluyendo a todos los del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), para centrarse exclusivamente en la realidad de las empresas y hablarle al unísono al Gobierno.

Esa unidad pasa por resolver el conflicto en Ferrominera Orinoco (FMO) donde -a juicio de Morocoima- los trabajadores despedidos están sufriendo las consecuencias de haber quedado en la “línea de fuego” de quienes se disputan el control de las empresas.

Lo más sano -propuso- es que se designen autoridades nacionales, desvinculadas de la zona, que hagan las investigaciones por el caso del trabajador fallecido, Renny Rojas.

“Si ellos tienen dudas de quiénes fueron, nosotros también tenemos dudas de las personas a quienes ellos están acusando. Esto se resuelve con que ninguno de los entes de aquí participe y que eso lo tome un ente externo”.

El dirigente, víctima de una golpiza y un disparo en las inmediaciones de CVG Bauxilum, calificó de “dramático” el escenario pues -al parecer- no hay ninguna posibilidad de que se produzca un aumento por los caminos regulares.

En cambio -criticó - que el presidente de CVG Bauxilum, José China, haya llevado a junta directiva la propuesta de aumento de su salario y que ésta haya sido aprobada. Cree que ese mismo esquema “corporativo” se aplicó en el resto de las empresas.

Morocoima hizo público un exhorto al vicepresidente de la república, Elías Jaua, quien -a su juicio- debería tener el tema de Guayana como uno de los principales en su agenda. No sólo por el contexto político, sino porque esas circunstancias están afectando el normal desenvolvimiento productivo de las fábricas.

El director laboral de CVG Venalum, Leonardo Calderón, pidió a la dirigencia de la Fuerza Bolivariana de Trabajadores (FBT) no mentirle al colectivo pues el ministro no tiene algún punto de cuenta firmado ni por firmar para aprobar el pago de algún tipo de pasivo o aumento.

Las empresas, según les explicó José Khan, deberán resolver -con sus propios medios- la condición operativa y laboral de las fábricas.

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